¡La tierra en peligro!
Norberto Amaya A. ////// México,D.F. a 14 de septiembre de 2015.
La tierra, nuestra casa, parece convertirse cada vez más en un inmenso depósito de porquería. ( Papá Francisco )
Desde hace años, con varios jóvenes denunciamos el abuso en la explotación de los recursos naturales, de distintas formas realizamos actividades que generaran conciencia del daño que se le hacía y se le hace a la madre tierra. Nuestras fuerzas eran limitadas y nuestros recursos humanos y materiales muy escasos. Lo último fue el apoyo entusiasta a "La Hora del Planeta", que implicaba apagar luces en la noche en varias partes del mundo. Algo se hizo.
Las recientes declaraciones deNahomi Klein, Noam Chomsky, la encíclica Laudato sí del Papá Francisco, los documentos de Eduardo Galeano y otros cientos de escritores, artistas, ecologistas y organizaciones varias, nos deben hacer pensar que en realidad deberíamos hacer un alto en el camino y reflexionar sobre el mundo de hoy y el que se va a heredar a nuestros hijos. Todavía se puede.
Los intereses de los grupos económicos y de los gobiernos están por encima de los derechos de la humanidad y violan cotidianamente las leyes que ellos mismos se auto imponen. Para una sociedad mercantilista y de consumo, no hay ley alguna que se respete que no sea la suya. No se puede permitir ya más la destrucción de la naturaleza.
Sí uno lee a quienes en estos días abordan con seriedad el tema, de verdad que es espantoso y terrible lo que viene. Todo diagnóstico es causa de depresión y causa de nausea. ¿Por qué hemos sido tan crueles e insensatos con nuestro mundo? ¿Qué otras cosas queremos que nos digan para entender la catástrofe anunciada? La película de los setentas "El fin del mundo", se queda corta.
Pero que hacemos en México y nuestro continente para alertar sobre el uso de combustibles fósiles, para abordar el cambio climático o para detener la contaminación de de nuestros mantos acuíferos, ya no se diga la devastación de bosques, selvas y montañas. Son temas que ya hemos abordado con antelación, pero hoy me parece obligatorio retomarlos. La cuenta regresiva inició desde hace mucho y no queremos asumir responsabilidad alguna.
Por otro lado, los gobiernos y los organismos internacionales no garantizan ya nada para establecer acuerdos creíbles. Cada Conferencia Internacional o reuniones de los países industrializados se sustentan en prolongar una agonía del planeta Tierra y fundamentar la defensa de sus "intereses", en cada encuentro hay una mezquindad que hace vomitar al escuchar las palabras insensatas de quienes dominan el poder mundial. La naturaleza muere, la fauna desaparece, la flora se extingue y nosotros también morimos a cada instante.
La pregunta entonces es regresando a Lenin. ¿Que vamos a hacer? O por otro lado pensar en que forma vamos a desaparecer con la acción destructiva cotidiana del ser humano. Hace meses, Barak Obama se regodeaba de que su país, producía mayor petróleo, gas y consumo de electricidad, mientras sus representantes discutían acaloradamente con China, Europa y demás sobre medidas para reducir el cambio climático, la verdad, de risa loca. ¿Y los mexicanos y sus gobiernos que dicen al respecto?
Reflexiones. Ustedes saben que por cada árbol que se tala, cada río contaminado, cada plástico arrojado al mar, por cada animal que muere, el hombre está destruyendo su entorno y el planeta sufre heridas que jamas van a cicatrizar. Al tiempo.
Hay voces y gritos que solo tienen como respuesta silencios cómplices.
Mail. norbertoamaya21@gmail.com y Twitter, @Amaya5M.
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