Þ El ex presidente municipal de Quecholac, un dirigente débil, a modo.
Þ Piso parejo, había prometido Américo Zúñiga, como delegado del CEN con funciones de presidente.
Þ Quedan fuera, Juan Manuel Vega Rayet, José Luis Márquez, Lorenzo Rivera Sosa y “los erikos”.
Þ Vega Rayet amenaza con renunciar al PRI, pero por los señalamientos en la estafa maestra y su pasado como edil de Izúcar, lo hacían también un dirigente fácil de amordazar
Una vez más el PRI da nota, previo al proceso electoral que iniciará en el mes de septiembre, al nombrar, el Comité Ejecutivo Nacional, de manera unilateral y de forma “sorpresiva”, al muy cuestionado ex presidente municipal de Quecholac, Néstor Camarillo Medina
Con su nombramiento, el CEN del tricolor ayuda a reafirmar ese rumor, el de la posible alianza entre el PRI y MORENA, que le permita al partido en el poder, al menos en Puebla, conservar mayoría en el Congreso local, en lo que se ha dado en llamar como el PRIMOR. La versión moderna de la vergonzosa alianza del ex partidazo con el gobernador Rafael Moreno Valle
Esta designación, que ya se veía venir, deja fuera, sin mayores explicaciones a quienes habían manifestado, junto con Camarillo Medina, su aspiración para dirigir al PRI en Puebla.
Entre quienes se quedaron fuera, destacan Juan Manuel Vega Rayet, José Luis Márquez, Lorenzo Rivera Sosa y a los conocidos como “los erikos”, Erik Salgado y Erika Lima, quienes habían levantado la mano como formula a presidente y secretaria general respectivamente.
Todavía hace unas semanas, Américo Zúñiga, el delegado con funciones de presidente, que ocupó el cargo luego de la renuncia forzada de Lorenzo Rivera Sosa, había insistido en que habría piso parejo para todos.
Sin embargo se confirmó el rumor que circuló en el sentido de que la balanza se estaba inclinando a favor de Camarillo Medina, luego de que éste presentó su renuncia a la Secretaría del Organización del CDE, para registrarse al proceso interno.
El ex alcalde, Néstor Camarillo, de uno de los municipios ubicado en el triangulo rojo, había negado ser el delfín, pero había asegurado que si él asumía la dirigencia, abriría la puerta a todos los “traidores y detractores del PRI en Puebla”.
Luego de conocido el nombramiento, los grupos al interior del PRI comenzaron a manifestar su inconformidad ya que aseguran se esperaba un proceso democrático el que se dejara de lado la imposición para poder enfrentar con éxito las elecciones de 2021.
Cabe destacar que Néstor Camarillo ha sido muy cuestionado en su paso por la presidencia municipal de Quecholac, donde inclusive fue inspeccionado por el área de investigación financiera de la Secretaría de Hacienda y de la Procuraduría General de la República, en coordinación con el CISEN, junto con los ediles de Palmar de Bravo, Tecamachalco y Cuyoaco. Inclusive en aquel municipio, encabezado por Camarillo Medina, se dieron hechos violentos en los que murieron cuatro militares y seis civiles.
Por si fuera poco, también Néstor Camarillo estuvo en el ojo del huracán ante las investigaciones de la Auditoría Superior del Estado, instancia que detectó “irregularidades” en al menos cuatro rubros que provocan un quebranto en la Hacienda Pública.
Todo lo anterior, aseguran los priistas, puede ser utilizado por los otros actores y partidos políticos, para dinamitar al instituto.
También nace, una vez más, la sospecha de un posible acuerdo, como en los viejos tiempos de Rafael Moreno Valle, de alianzas para que el PRI realice nuevamente campañas mediocres, en las que se desprecie a la militancia para que el partido en el poder pueda ganar sin dificultad mayoría del Congreso local y presidencias municipales, es decir, lo que se ha denominado como el PRIMOR.
Por todo lo anterior es que diversos actores políticos han reprobado el nombramiento anunciando su posible salida del PRI, por haber perdido su carácter democrático. Entre estos inconformes está Juan Manuel Vega Rayet, ex delegado de SEDESOL.
Cabe destacar que en Vega Rayet, igual que Néstor Camarillo, pesan sobre sus espaldas señalamientos en su paso por la presidencia municipal de Matamoros, y la delegación de Sedesol, donde se le acusaba de ser cómplice de Juan Carlos Lastiri en la llamada estafa maestra. Ante esos señalamientos el propio Vega Rayet rechazó cualquier aseveración que lo ligara con esos ilícitos al tiempo de afirmar que: “Yo no estoy involucrado en ninguna Estafa Maestra, es un tema de la Secretaría, no tiene absolutamente nada que ver, ni por qué involucrar al PRI poblano con esta situación. En un mundo de libertades cada quién responde por sus hechos y aquí es otra situación. Están las instituciones y las leyes, que participe él (Juan Carlos Lastiri) y que se defienda si es que está acusado, desconozco”, dijo el ex delegado en Puebla de la Sedesol”.
Como presidente municipal de Matamoros fue acusado de al menos ocho obras pagadas al cien por ciento, pero que no fueron terminadas por un monto de un millón 600 mil pesos.
Incluso, el actual secretario de Educación Melitón Lozano al asumir el cargo de presidente municipal de Matamoros en 2003, solicitó al auditor general del Organo de Fiscalización Superior, ORFISE, José Doger Corte, practicara una auditoría a Vega Rayet.
Ante esto, Vega Rayet también hubiera sido un dirigente del PRI débil y a modo para ser controlado. (F)
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