Mientras el miedo a la inseguridad se apodera de los habitantes de Cuautlancingo, el edil Felix Casiano se esconde.
Luis Alberto Perea
En el municipio de Cuautlancingo desde hace unos meses la gente ya no está tranquila, la inseguridad y el miedo se han apoderado de sus vidas, sobre todo, por la incapacidad que han mostrado las autoridades municipales encabezadas por el edil Felix Casiano. Todos los días se comenten toda clase de delitos que a la fecha han quedado impunes.
Durante recorrido que realizó Foro 7 por esa localidad colindante con el municipio de Puebla, tuvimos la oportunidad de platicar con vecinos y comerciantes de Cuautlancingo, quienes nos manifestaron sus inquietudes y temores por no poder llevar ya una vida normal, tranquila, ante los embates de la delincuencia.
Explican que han buscado al presidente municipal para exponerle sus preocupaciones, pero que ha sido más que imposible platicar con él, ya que casi nunca asiste a sus oficinas de la presidencia municipal.
“Siempre que buscamos a Casiano, nos dicen sus empleados que el señor presidente se fue a Puebla, que fue al Congreso, que está acompañando al señor gobernador o que está en México buscando bajar recursos para el municipio, la cosa es que nunca está”, nos dijo en forma de queja un comerciante del centro de la población, quien nos pidió no mencionar su nombre ni donde está su negocio por miedo.
Nos dicen que en la “Dirección de Seguridad Pública”, del municipio siempre hay mucha gente “disque trabajando”, pero que cuando se les requiere por cualquier problema, ya sea que hallan asaltado a los que viajaban en una combi o en la calle, o en su casa, y se les pide ayuda, curiosamente nunca se presentan.
“Pero eso sí, los fines de semana en la noche y madrugada ponen retenes para agarrar borrachitos, nada más para eso sirven los policías”.
Informaron que durante su visita del candidato Tony Gali ya le pidieron ayuda y que les prometió que hablaría con el presidente municipal que cuando fuera gobernador la seguridad pública de Cuautlancigo estaría en primer lugar, por lo que no les queda más que esperar la ayuda del candidato del PAN.
Finalmente los quejosos pidieron que ya no se les preguntara más, que tienen miedo y de los graves acontecimientos que hace poco sucedieron prefieren mejor no hablar.
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