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El teje y maneje PGR delegación puebla

Por Braulio Paisano

Puebla, Pue.- Hace unos días, el 11 de mayo del año corriente poco después de las 23:00 horas, en las inmediaciones de los municipios de Acatzingo-Nopalucan, se llevó acabo el aseguramiento de una persona y dos vehículos en los que viajaban al menos unas seis personas, que tras una persecución por parte de la policía estatal preventiva, en su mayoría lograron escapar.

Los hechos ocurrieron en la comunidad de Virreyes de Juárez, perteneciente al municipio de Acatzingo, en la carretera Nopalucan-Acatzingo a la altura del kilómetro 15, momentos que según el respectivo parte informativo, los policías Antonio Hernández Pacheco, Rafael Zúñiga Reyes, y el oficial Fidel Sierra Arias, a bordo de la patrulla PE-334, ubicaron las unidades que transitaba por el lugar; una camioneta tipo 3 ½ toneladas con caja de redilas color azul, seguida por una pik-up doble cabina color gris, en la que viajaban varios sujetos. Al percatarse de la presencia policial, aceleraron su marcha, lo que dio paso a la persecución, y metros más adelante el aseguramiento.

Todo lo anterior fue tomado de manera directa del respectivo parte informativo fechado el 11 de mayo del 2016, sin embargo, en el seguimiento respectivo, sale a la luz que la persona asegurada, quien responde al nombre de Javier Rojas Salaz, de 33 años de edad y con domicilio en la misma comunidad de Virreyes de Juárez, pese al habérsele encontrado en posesión de una camioneta de redilas de 3 ½ toneladas, y que transportaba un contenedor rellenado con lo que parecía ser combustible robado de los ductos de PEMEX, fue puesto a disposición ante el ministerio público de la Fiscalía General de Estado de Puebla, por la supuesta posesión de un vehículo con reporte de robo.

Ahora bien la cosa no para con la anterior anomalía, resulta que todo lo anterior estuvo de conocimiento ante personal de la Procuraduría General de la República delegación puebla, tal y como lo comentó en su momento el relator del parte informativo oficial de la policía preventiva del estado de Puebla, (como se ve en la imagen adjunta), desde el mismo momento de la detención, el presunto Javier Rojas Salaz, intento cohesionar a los elementos de seguridad pública, y ofreció 35 mil pesos, más el efectivo que llevaba en la bolsa para que lo dejara irse sin que lo presentaran ante la autoridad. Mencionando de antemano que al final tendrían que presentarlo ante el Ministerio Público Federal, y ante la negativa de aceptar el cohecho, refirió “pues entonces háganle como quieran, total me van a llevar con Marcos, el MP de la federal, es mi cuate y ahí en caliente le bailo una lana y ustedes se van a quedar como pendejos”. Lo que no estuvo del todo incorrecto y en realidad fue de conocimiento del personal de la PGR delegación puebla.

El parte informativo oficial, mejor conocido en el argot ministerial como “desglose policial” fue enviado a “Marcos”, el de la Federal, y en efecto es Ministerio Público de la PGR, y se trata de Marco Arturo Valencia Galván, y tal parece que si le extendieron las facilidades a Javier Rojas Salaz para que no fuera remitido ante la justicia federal, Marco Arturo Valencia Galván, apoyado por su esposa la Fiscal Federal Nayeli Vara Márquez, y los comandantes  de policías ministeriales Nicolás Arellano e Iván Carrillo manosearon la puesta a disposición logrando evitar que se mencione el posible delito de robo de hidrocarburo, dejándolo únicamente por el de posesión de vehículo con reporte de robo. Lo que se puede contrastar con el respectivo proceso judicial.

Lo anterior coincide, con parte de la declaración de los elementos de la policía preventiva estatal que realizaron el aseguramiento, quienes además, señalaron, que Javier Rojas Salaz, desde el momento mismo en que intentó corromperlos, mencionó que Marco Arturo Valencia Galván es su protector, apoyado por los comandantes de policías ministeriales Nicolás Arellano e Iván Carrillo, quienes según dichos testimonios, reciben un peso por cada litro de combustible obtenido de manera ilegal. Agregando que “ustedes saben que los comandantes son los que autorizan el trabajo de los cuchicoleros, y les damos un peso por litro que movemos”

La investigación de este caso, deja abiertas muchas otras tantas interrogantes, sobre todo porque a la fecha, Efraín Alonso Gestalum Padilla, delegado de la Procuraduría General de la República delegación puebla, no ha referido opinión al respecto de lo que pasa en su dependencia.