En aeropuertos, pasajeros de Centro y Sudamérica reciben tratos humillantes, exhaustivas y tardadas revisiones.
· Los tratan de manera diferente que a los de otras regiones del mundo acusa el diputados federal Alfredo Javier Rodríguez Ávila
· Legislador propone capacitar y sensibilizar a personal de aduanas para mejorar la atención de la población latina
Entre enero y noviembre de 2016, ingresó a México un millón 794 mil ciudadanos de América Central y del Sur. El presidente de la Comisión de Transportes, de la Cámara de Diputados, Alfredo Javier Rodríguez Dávila (PAN), planteó exhortar al Ejecutivo federal para que agilice las revisiones migratorias, de seguridad y aduanales, en los aeropuertos internacionales, a las personas y equipajes provenientes de Centro y Sudamérica.
Además, para que la Secretaría de Gobernación (Segob) -particularmente el Instituto Nacional de Migración, la Policía Federal y la Subsecretaría de Derechos Humanos-, y la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, mediante la Administración General de Aduanas, capaciten y sensibilicen a su personal para que la atención que brindan a dichos pasajeros sea eficiente, de calidad y con total respeto a sus derechos humanos.
Rodríguez Dávila expresó que, de acuerdo con datos de la Unidad de Política Migratoria de la Segob, entre enero y noviembre de 2016 ingresaron a México 14 millones 455 mil extranjeros en alguno de los aeropuertos internacionales del país; de ellos, un millón 794 mil, 14 por ciento del total, provenían de América Central y del Sur.
Aunque la mayoría de los extranjeros viene de América del Norte, no debe desatenderse y mucho menos segregarse al importante tráfico de pasajeros que llega al país desde otros lugares del mundo, sobre todo si se trata de una región tan importante como es América Latina, de la cual México también es parte, demandó.
Aseguró que hay una marcada diferencia en el trato que reciben los pasajeros de vuelos de Centro y Sudamérica, en comparación con aquellos que arriban de otras regiones del mundo.
El diputado argumentó que el equipaje y los propios viajeros enfrentan exhaustivas revisiones de seguridad que pueden prolongarse durante horas, lo cual es un acto de molestia que provoca que su llegada a México sea una experiencia desagradable; incluso, se han documentado casos de personas que han sido sometidas a entrevistas en filtros de seguridad adicionales, en lugares apartados e incomunicados.
Resaltó que el tema de seguridad es esencial y la aplicación de los protocolos ha permitido, entre otras cosas, importantes decomisos de estupefacientes, armas y dinero en efectivo, pero “no se puede utilizar esto como pretexto para vulnerar los derechos de los pasajeros tratándolos de manera humillante y menoscabando su dignidad”.
Las vejaciones a los paseantes originarios de Centro y Sudamérica, añadió, han producido incluso recomendaciones de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, en las que se documentan actos de arbitrariedad consistentes en insultos, retenciones e incluso deportaciones ilegales, cometidos por personal del Instituto Nacional de Migración.
Alfredo Rodríguez denunció que esta situación se presenta particularmente en el Aeropuerto de la Ciudad de México, donde se concentra la mayor parte de las llegadas internacionales, pero también una gran cantidad de este tipo de quejas que no pueden justificarse, sobre todo teniendo en cuenta el funcionamiento de otros aeropuertos en el mundo que registran un tráfico similar o incluso superior al de esta terminal.
En terminales aéreas de otros países, mencionó, los pasajeros no son segregados y las revisiones de seguridad son mucho más ágiles y transparentes, “por lo que no hay motivos para que en el de la Ciudad de México sea distinto”.
Indicó que estereotipar a quienes provienen de ambas zonas de América Latina y tratarlos como presuntos delincuentes sólo por su procedencia, es un acto de evidente discriminación, lo cual viola sus derechos humanos y va en contra de lo señalado por la Carta Magna.
“No se trata de que no se realicen revisiones de seguridad, lo que se busca es que los procedimientos sean claros, prontos y transparentes para todos los viajeros, sin importar su procedencia”, añadió.
El diputado consideró indispensable que dichas dependencias mejoren sus protocolos de actuación y de coordinación, para la atención de los pasajeros que llegan desde la zona mencionada y que su personal se sensibilice para prestar un servicio más atento y respetuoso.
“No se debe permitir que el trato que otorgan las autoridades en las llegadas internacionales de los aeropuertos del país, afecte la imagen de México como un destino turístico atractivo para personas de Centro y Sudamérica”, afirmó.
Por el contrario, añadió, se deben promover acciones para que los pasajeros de estos lugares tengan trato respetuoso y una experiencia grata que los incentive a visitarlo nuevamente y a recomendarlo entre sus connacionales”.
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