jueves, 20 de octubre de 2016

“Ponte BUSSA”, no más delitos contra la mujer
Con BUSSA, un equipo multidisciplinario de la BUAP ganó primer lugar del Concurso Estudiantil Prototipos de Innovación Tecnológica 2016
En la categoría App’s, del Concurso Estudiantil Prototipos de Innovación Tecnológica 2016, BUSSA destacó por su aplicación en el entorno social, al proponerse evitar que las mujeres sean objeto de inseguridad social y se ponga en riesgo su vida. Sus desarrolladores, un equipo multidisciplinario de la BUAP, integrado por Juana Carpintero Flores, Viridiana Álvarez Tello, de la Facultad de Arquitectura; David Guillermo López Vázquez, de la Facultad de Ciencias de la Computación; y Rubenell Fernández Rodríguez, de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales.
BUSSA, proyecto que ganó el primer lugar de la categoría App’s del Concurso Estudiantil Prototipos de Innovación Tecnológica 2016, se apoya en la red social del usuario, es programable para que sus tres contactos más allegados sean notificados, mediante alertas answare, de la ubicación y posibles zonas de peligro en las que se encuentre.
A diferencia de otras aplicaciones creadas para la prevención del delito en México, más que un botón de pánico, BUSSA es un semáforo de peligro, el cual evita emitir falsas alarmas a los contactos, ya que cuenta con tres alertas. En la fase verde los contactos de la usuaria obtendrán la ubicación y los datos de su acompañante, en la fase amarilla la aplicación le solicita una respuesta para notificar que está segura, y en caso de no responder la aplicación emite la alarma roja para notificar a los tres contactos que está en peligro, proporcionando su ubicación, qué personas la acompañan y última actividad del usuario.
Los alumnos que desarrollaron BUSSA trabajan en el diseño de íconos e interfaces, además de estudio de casos, para no perder el mínimo detalle. Antes de crear el prototipo, realizaron un estudio de campo en torno a las posibilidades de peligro, de lo cual derivaron aspectos cruciales para el uso de la aplicación, como la imposibilidad de sacar el teléfono móvil en el momento de la emergencia, los colores empleados pues algunos pueden desestabilizar aún más a la persona en peligro, el funcionamiento de la aplicación en los equipos y la necesidad de reducir a menos de 72 horas el tiempo para los peritajes, para aportar datos específicos y agilizar las investigaciones.
Los jóvenes diseñaron la aplicación con base en experiencias pasadas en torno a las aplicaciones móviles. El equipo se conformó inicialmente para participar en el Innovatrón con la aplicación Ecoparque. Posteriormente, la convocatoria de la tercera edición del Concurso Estudiantil Prototipos de Innovación Tecnológica fue el pretexto para crear una aplicación renovadora.
El impacto social fue la premisa a seguir, pasando por proyectos de alerta ciudadana, App’s contra el bullyng, para por fin desarrollar BUSSA, o como gustan llamarlo sus autores “Ponte BUSSA”, dirigido específicamente a las mujeres, un sector vulnerable en la inseguridad pública en México.


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